sábado, 28 de noviembre de 2015

Lo que tus ojos no vieron

Soy el amor que rechazaste. Soy la alegría que te negaste. Soy la vida que abandonaste. Soy el mundo que no exploraste. Soy el cielo que no volaste. Soy el fuego que no apagaste. Soy la lluvia donde no te mojaste. Soy el pasado que cambiaste. Soy el presente que mataste. Soy el futuro que enterraste. Soy la oportunidad que despreciaste. Soy la locura que encadenaste. Soy la razón que no creíste. Soy la mujer que no entendiste. Verónica Treviño

sábado, 10 de octubre de 2015

Estar triste es fácil

Estar triste es muy sencillo solo tienes que sujetarte con fuerza de lo más doloroso y dejarte caer en un sillón,en la cama o en el rincón más olvidado de la tierra,el lugar es lo de menos,lo que importa es tener un sitio donde rumiar tu tristeza y recordar jalar la herida,cuidando de mantenerla bien abierta ya que sin dolor no hay tristeza. Estar triste tiene sus ventajas ya que puedes quedarte tranquilamente sin darte cuenta cuando sale el sol anunciando un nuevo comienzo o en qué momento se oculta para cederle el paso a la luna que alumbra jubilosa a todas las estrellas repletas de deseos. Estar triste es el camino más seguro que te lleva a la soledad,el mundo no quiere personas tristes,el mundo le gusta llenarse de gente con sonrisas,las personas tristes para el mundo son como una de esas enfermedades que hasta ahora no tienen cura,así que todo lo que huela a tristeza lo van aislando. ¡Ah!,pero ten mucho cuidado de cuánto tiempo le das alojamiento a la tristeza,ya que entre más prolongues su estadía,más te acostumbras a ella y terminas por encariñarte;dejándola como huésped vitalicio. Estar triste es muy sencillo,está al alcance de cualquier bolsillo. Sólo la alegría es para la gente que a pesar de haber vivido en la comodidad de la tristeza,elige la titánica labor de vivir en la complejidad de la alegría. Verónica Treviño

Crónica del insomnio

Algo pasa a las 3:00 a.m que el sueño despierta y se escapa. Por más que intente alcanzarlo no logro siquiera rozar alguna partícula de esos famosos polvos mágicos que logran transportarnos al tan renombrado país de los sueños. No tengo más remedio que quedarme ahí a esperar,quietecita en la orilla de mi placentera cama,después de un rato elijo intentar en otro lado de mi placentera cama con la esperanza de que la espera sea menos prolongada,pero nada! Cambio de postura y giro para ambos lados,boca arriba,boca abajo,ya explore toda mi maldita y placentera cama,todo es inútil,el anhelado sueño nada que regresa. Me incorporo y enciendo la lámpara,tomo mi libro que deje olvidado hace ya más de 6 meses encima del buró al lado de la lámpara, la ansiedad empieza apoderarse de mi,ahora recuerdo porque dejé olvidado mi libro hace ya más de 6 meses en el buró al lado de la lámpara. No me queda más opción que encender el televisor,das la vuelta a los escasos 6 canales de televisión abierta ahora digitalizados,en una búsqueda infructuosa por encontrar algo que no sean comerciales,comerciales,comerciales...ya ni la chica que habla todo el tiempo sola en ese programa de concurso de complete la palabra,ya ni ella sale a esa hora. Miro el reloj son las 5:00 a.m en una hora más sonará mi celular con el divertido y melodioso ring,ring...a cargo de los pequeños minions y el condenado sueño ni sus luces,bajaré a comer un trocito de ese delicioso pay de queso que prepare ayer en la tarde,quizá con la barriga llena el sueño regrese. Verónica Treviño

¿Cuándo?

¿Cómo saber cuándo parar o cuando seguir,cuándo luchar o cuándo rendirme,cuándo aferrarme o cuándo soltarme?...cuando sienta que el carrete de las posibilidades no gira más,es que esta a punto de romperse y llevarse la última hebra en donde se encuentran atadas mis ilusiones y mis alegrías.Ese es el momento de cortar el hilo y dejar volar el cometa. Verónica Treviño
Si esperas que cambie y no ves que lo haga,es como pedirme deshazte y se otra y si alguien quiere que me deshaga,es alguien que no me quiere como estoy hecha.Verónica Treviño

sábado, 26 de septiembre de 2015

Eres de esas pocas personas que sabe sonreír sin mover la boca. Verónica Treviño

lunes, 21 de septiembre de 2015

Al despertar el alba resplandece la esperanza, colándose por cualquier recoveco para iluminar el alma. Verónica Treviño